lunes, 26 de mayo de 2008

Las Aventuras del Joven Indiana Jones: El Tesoro del Ojo del Pavo Real.


Tendría yo unos 7 u 8 años cuando Antena 3 emitía algunos de los capítulos de ésta serie. Una tarde de fin de semana estaban echando un episodio llamado "El tesoro del Ojo del Pavo Real". Fue mi primera toma de contacto con ese personaje y con ese tipo de aventuras tan frenéticas de un país a otro, de templos en medio de selvas frondosas, de villanos y traiciones por todo el mundo… Pasó mucho tiempo hasta que vi las tres películas originales cuando me las prestó un amigo de mi hermano en cintas de video (él sería un chavalín de unos 11 o 12, pero ya era un buen fan del cine de acción donde reinaban Arnold y Stallone, tenía en su casa un montón de VHS: La Jungla de Cristal III, Doble Impacto, Mentiras Arriesgadas…). Hasta hace poco no volví a ver ese episodio del joven Indiana Jones. La serie en sí no me entusiasmaba verla, recuerdo que después de "El tesoro…" intenté ver algún episodio pero había algunos bastante aburridos sin tener nada que ver con el Jones aventurero. Aún así, el episodio en concreto mi mente lo recordaba con muchísimo cariño y cuando hace un mes o así me decidí a revisar la saga de Indy antes del estreno de "El Reino de la Calavera de Cristal", decidí empezar por la misma película que empecé de pequeño (los episodios se distribuían y emitían como telefilms de hora y media).

Sería una idiotez comparar éste telefilm con alguna de las películas de la trilogía original de Indiana Jones, por eso no lo voy a hacer. Pero la verdad es que cuando me puse a verlo pensaba que sería una mierda, que los buenos recuerdos de mi niñez serían como los de Dragon Ball Z (ahora veo un capítulo y no sé como de pequeño me podía enganchar a algo con tan poco avance, aunque le siga teniendo un gran aprecio y le agradezco lo divertida que fue mi infancia viéndola), pero la verdad es que no. Tiene una ambientación muy conseguida y la historia es sensacional (creo que el propio Lucas escribía un breve argumento a los guionistas de la serie para cada capítulo), además el protagonista Sean Patrick Flanery es un digno Indiana Jones veinteañero, me parece muy natural y que imprime muy bien la ingenuidad y bonhomía del personaje. Además, la aventura tiene un final que no podía ser mejor para la historia, de nuevo vemos que Indy se ha quedado a punto de conseguir algo y o bien no ha podido (la cruz de colorado cuando era adolescente -aunque luego la recuperase-, el Arca de la Alianza que no sirvió de nada encontrar, el Santo Grial…) o ha decidido dejar de buscarlo (como en esta historia).

Termina la Primera Guerra Mundial en Europa y Indiana Jones vuelve a casa con su compañero Remy (el cual había formado equipo de aventuras con Jones en varios episodios anteriores). Uno de sus compañeros en las trincheras era un traidor y cuando Indy y Remy fueron a arrestarlo, un alemán hijoputa con un parche en un ojo lo mató. El traidor llevaba consigo una especie de mapa que conducía a un tesoro: uno de los dos diamantes que fueron los ojos de una estatua de Alejandro Magno, un pavo real de oro. Indy y Remy están convencidos de que pueden encontrar el diamante y se embarcan en un viaje de Londres a Alejandría, pasando por países de Suramérica, siguiendo el mapa del soldado caído. Durante el viaje se encuentran de nuevo con el alemán del parche en el ojo y otros tipos que andan detrás del diamante. Conocen a una chica que aparentemente sólo tiene mala suerte, pero que en realidad también va detrás del tesoro, y terminan en un barco que es asaltado por piratas chinos. Hay pelas a puñetazos, con sables… y Remy e Indy terminan en un bote que les lleva a una isla desierta. De esa isla van a otra, donde son rescatados por el antropólogo Bronislaw Malinowski, que está allí estudiando el comportamiento de los nativos. Todo lo que Indy y Remy han conseguido hasta ese momento es un pequeño cofre donde debe de ir el diamante, pero cuando lo abren descubren que no hay más que otra pista para ir a otra parte del mundo a seguir buscando. Malinowski aclara un poco las confusiones del joven Jones: consiga el diamante o no, lo que él quiere es estudiar arqueología en la universidad, porque es su sueño y lo conseguirá con tesoro o sin él. Indy tiene que tomar una decisión que cambiará su vida y que, dicho sea de paso, le ayudará a acostumbrarse al destino de un aventurero como él, que no siempre consigue lo que busca.

En una hora y media nos cuentan todo eso. Está claro que está hecho para televisión y las peleas y la acción suelen ser un poco cutres, pero para tener estas características es una aventura de lo más conseguida, del tipo de las películas de Indy. Otros de los muchos episodios se centran en historias protagonizadas por Indiana, pero no es cine de aventuras. Pero este sí, y se podría decir que para mí, siempre formará parte de la saga.

No es ninguna genialidad, pero sorprende que el guión, para ser un episodio de televisión y estar escrito por una persona en mucho menos tiempo del que se tiene para una película, respire ese aire de aventura clásica sin descanso y se nota que está escrito con esfuerzo. Además hay interpretaciones muy buenas, como la de Tom Courtenay (Malinowski) o Adrian Edmondson como el alemán con el parche en el ojo, un villano tópico y cutre pero para mí ya es entrañable (por lo menos no lleva el típico parche negro, y su destino no te lo esperas).

Como también es de costumbre en ésta serie, aparecen algunos personajes reales (Indy ha conocido a un montón de celebridades) como Howard Carter, arqueólogo que descubrió la tumba de Tutankamón (aquí todavía la anda buscando) y Edward Morgan Foster, famoso escritor inglés.

NOTA: 7/10.

2 comentarios:

Coronel Trautman dijo...

Joerrr.... has hecho que me ponga en el emule a descargar algunos de estos episodios. No me acordaba de las Aventuras del joven Indiana Jones XDDD.

Yo también las vi en la televisión y las recuerdo con un buen sabor de boca. Algunas estaban bastante bien realizadas y las historias eran bastantes buenas ( de hecho por lo que he oído por los foros algunas son mucho mejores que la nueva peli de Indi)

Recuerdo en especial a Indiana Jones de abuelo tipo John Ford (viejo y tuerto) al inicio y al final de cada episodio. Al fin y al cabo era el que contaba la historia.

Arkón dijo...

Pues sí, a mí este episodio por ejemplo me parece más serio y apropiado para el personaje que la del "Reino de la calavera de cristal". Lo del Indy viejo no lo he visto porque cuando se distribuyó la serie en video a modo de telefilms, quitaron esas introducciones.